Si bien no es lo más apropiado, no deja ciego a la totalidad de los perros. Si el perro es diabético, puede desarrollar cataratas al comer un exceso de azúcar, y a la larga, puede perder la visión.
Pero eso no quiere decir que el azúcar no les afecte, ya que puede cambiarles el apetito, facilitar la aparición de diarreas y cambios en la flora intestinal, por lo que lo más aconsejable es que no tengan dulces cerca.
Los perros pueden y deben seguir una dieta variada. Si le damos de nuestra comida, la dieta que deben seguir ha de incluir carne (evitando los huesos), pescado, quedo y yogur.
Esta comida «humana» se le debe proporcionar a la mascota en cantidades pequeñas (no más del 7% de su ración diaria), mezclándolo con su alimento habitual y siempre en su comedero.
Los productos de chuchería para mascotas, contienen todos los ingredientes beneficiosos y saludables para la mascota. Esto no significa que podamos darle un plato entero de estos premios, pero su ingesta no es para nada perjudicial.
Todo lo contrario. La carne cruda es una fuente de patógenos y lo mejor es no dársela. Para nuestra mascota, siempre la carne cocinada.
Vía: Heraldo.